LECCIÓN 180 (Repaso 169-170)

 LECCIÓN 180

 Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

 

1. (169)  Por la gracia vivo. ²Por la gracia soy liberado.

³Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

 

2.    (170)  En Dios no hay crueldad ni en mí tampoco.

²Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.



AUDIOS de la Lección 180
de CELEBRANDO EL MILAGRO


Lectura de la introducción al 5to Repaso
A través de Blanca Nivia Morales Contreras.

Lectura de la Lección 180
A través de Mariano Noé.


Ocurrir de la Lección 180
a través de Martin Musarra


Lección 180
comentada por 
Jorge Luis Álvarez Castañeda



































LECCIÓN 180

 

Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

1. (169) Por la gracia vivo. Por la gracia soy liberado.

 

2. (170) En Dios no hay crueldad ni en mí tampoco.

Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

 

Comentada por:

Jorge Luis Álvarez Castañeda

 

¡Que la paz sea con nosotros hoy!

 

QUINTO REPASO


En este repaso nos estamos preparando para la segunda parte del libro de ejercicios. Jesús, nos pide que le pongamos más empeño pues de ello depende nuestra propia salvación. Este repaso nos puede ayudar a seguir adelante con mayor certeza, mayor sinceridad y con mayor fe. Tener como guía la idea central del repaso: Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.


Oración


Haz la oración de la lección con toda fe. Ella te ayudará a realizar el repaso:


”Padre nuestro, afianza nuestros pasos. Aplaca nuestras dudas, aquieta nuestras santas mentes y háblanos. No tenemos nada que decirte, pues sólo deseamos escuchar Tu Palabra y hacerla nuestra. Guía nuestras prácticas tal como un padre guía a su hijo pequeño por un camino que éste desconoce, pero que aun así él sigue, seguro de que está a salvo porque su padre le muestra el camino.

_De este modo es como llevamos nuestras prácticas hasta Ti. Si tropezamos, Tú nos levantarás. Si se nos olvida el camino, sabemos que siempre nos lo recordarás. Y si nos extraviamos, no te olvidarás de llamarnos de vuelta. Aligera nuestros pasos ahora de modo que podamos caminar con mayor certeza y mayor rapidez hasta llegar a Ti. Y aceptamos la Palabra que nos ofreces para unificar nuestras prácticas, a medida que repasamos los pensamientos que nos has dado”_.

 

Jesús, nos dice que le pidamos al Padre que aplaque nuestras dudas y aquiete nuestras santas mentes. Es decir, que tengamos menos juicios, menos resentimientos y pensamientos no amorosos para poder escucharlo cuando le pedimos que nos hable. Sólo deseemos escucharlo. Queremos escuchar Su Palabra y hacerla nuestra.

 

Le pedimos que guíe nuestras prácticas como un padre lo hace con su hijo. Necesitamos aceptar que no sabemos nada pero que hay Alguien a nuestro lado que, si sabe y está dispuesto a ayudarnos, si se lo pedimos. Necesitamos confiar que, si nos tropezamos, nos levantará.  Si nos extraviamos y olvidamos el camino, Él nos ayudará a no perder el rumbo. Le pedimos que aligere nuestros pasos al ayudarnos a quitarnos las culpas y miedos del pasado y el futuro. Y, en esa forma, tendremos mayor certeza al tener claro el propósito de lo que hagamos. Todo esto hará que más rápido lleguemos a nuestro objetivo central: Dios. Lo que implica la aceptación de la Palabra de Dios como lo que unificará nuestras prácticas.


El pensamiento central 


El pensamiento central del repaso es:

Dios es sólo Amor, y, por ende, eso es lo que soy yo.

Precede a los pensamientos a repasar que clarifican algún aspecto del Ser que expresa ese pensamiento central. Sólo este Ser conoce el Amor, nos dice Jesús. Siempre hemos tenido el recuerdo de Dios que está en este Ser. Los Pensamientos del Ser son perfectamente congruentes: lo que piensa, lo que dice, lo que hace, son lo mismo. El Ser conoce a Su creador: acepta que fue creado por Dios y no por el ego, como el ser con minúscula, del ego. Se comprende a Si Mismo al aceptar Su Identidad como Hijo de Dios. Goza de un conocimiento y amor perfectos al estar en el Cielo con Dios y disfruta de Su Amor y conocimiento perfectos. Y nunca abandona su estado de unión con Dios, no tiene nada que ver con la separación.


Cada una de las ideas que se van a repasar clarifican algún aspecto de dicho pensamiento central o contribuye a hacerlo más significativo.

 

Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

1. (169) Por la gracia vivo. Por la gracia soy liberado.


Hemos venido haciendo este Quinto repaso alrededor de este bello pensamiento central: Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo. Si lo aceptamos de corazón habremos resuelto todas nuestras incertidumbres y dudas y nos decidiremos por hacer la Voluntad de Dios: ser felices. Cuando decimos:


_”Por la gracia vivo. Por la gracia soy liberado”_. 


estamos en el camino del ser felices. La gracia es el atributo del Amor de Dios que más se asemeja al estado de unidad de la verdad. La gracia es la aceptación del Amor en un mundo de aparente odio y conflicto y sólo, mediante ella, puede desaparecer el odio y el miedo. La gracia nos prepara para oír el llamado a despertar y el perdón puede darnos atisbos del estado de gracia. El perdón es el eje central de la salvación y nos ayuda a desempeñar el papel que nos corresponde en el plan de Dios para la salvación.


Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

2. (170) En Dios no hay crueldad ni en mí tampoco.


Si Dios es Amor y Él quiere para nosotros nuestra perfecta paz y felicidad podemos afirmar con toda seguridad que _”En Dios no hay  crueldad y en mí tampoco”_. En este mundo nadie ataca sin intención de herir, de hacer daño y, al hacerlo, tiene que plantearse defensas que lo protejan de la posible reacción de a quien atacó. Lo que hacen las defensas es incrementar el miedo. El miedo más grande del mundo del ego es el miedo a Dios. Creemos que Dios nos va a castigar por creer habernos separado y por haberlo atacado. Por eso, esperamos el castigo de Dios, en cualquier momento.


Esto nos lo explica Jesús en el capítulo 24 sección I:

 

_”Tu temor a Dios y a tu hermano procede de cada creencia de ser especial que aún no has reconocido. Pues exiges que tu hermano se postre ante ella en contra de su voluntad. Y Dios mismo tiene que honrarla o pagar las consecuencias…Te resistes a aceptar este curso porque te enseña que tú y tu hermano sois iguales. No tenéis ningún propósito que no sea el mismo, ni ninguno que vuestro Padre no comparta con vosotros”_. T-24. I. 8: 1-5, 6.


Pero este miedo no tiene fundamento pues Dios es sólo Amor y, por ende, es lo que soy yo.



*Proceso de práctica de la lección *


Tiempo de quietud por la mañana y por noche.


Les recomiendo leer la Introducción al QUINTO REPASO. Es muy inspiradora y nos ayuda a clarificar para donde vamos con Jesús.


Apóyate de la oración para pedir la ayuda y la presencia de Dios en estos repasos para que contribuyan a tu proceso espiritual.


El centro del repaso es asimilar esta idea: 

Dios es sólo Amor, y, por ende, eso es lo que soy yo.


 Cerrar los ojos. Aquietar la mente. No engancharse en pensamientos distractores. El propósito del repaso es que logremos asimilar e integrar esta idea de verdad pues es fundamental en nuestro proceso. Lo que se busca con las ideas que se repasan es que clarifiquen la idea central, es decir, que encontremos aspectos de ella en las ideas del repaso y hacerlas más significativas.


En tu meditación intenta entrar en contacto con esa parte de tu mente donde hay paz y amor, tranquilidad, alegría. Es tu mente recta, donde está Cristo, tu Ser. Mantén la mente quieta sin palabras sólo con la sensación y certeza de que estás con Dios.


Espera a Dios. Él llegará y te dará un mensaje de amor y de paz.


Tiempo mínimo 5 minutos. Ideal 30 minutos o más. 


Las ideas de hoy a repasar son:

Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

Por la gracia vivo. Por la gracia soy liberado.

 

 

Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo.

En Dios no hay crueldad y en mí tampoco.


Recordatorios cada hora.


1 o 2 minutos a la hora en punto.

Repite la idea recordando que mientras lo haces Cristo permanece a tu lado dándote fortaleza.

Luego, siente la quietud y silencio y espera a Dios. Dale gracias por los regalos de la hora que ha pasado. Y deja que Su Voz te diga lo que Él quiere que hagas en esta hora que empieza.


Respuesta a la tentación.


Cada vez que sientas la tentación de  desconocer el Hijo de Dios que eres, que necesitas perdonar y que estás perdiendo la paz, repite las ideas del día.



Les deseo muchas experiencias con esta lección que contribuyan a su paz interior. Les recomiendo leer la Introducción al QUINTO REPASO y realizar la lección de la mano de Jesús y el Espíritu Santo tal como se les propone. Y sin olvidarse de reír, pues la Voluntad de Dios para nosotros es perfecta felicidad.


Muchas, muchísimas, bendiciones.

Jorge Luis Álvarez Castañeda














LECCIÓN 180


Comentada por:

Oscar Gómez Díez 


 ORACIÓN PARA PEDIR GUÍA EN NUESTRAS PRÁCTICAS: 


Para ello haremos diariamente a lo largo de este repaso la siguiente oración en la que pedimos guía y fortaleza a Dios:


"Padre nuestro, afianza nuestros pasos. Aplaca nuestras dudas, aquieta nuestras santas mentes, y háblanos. No tenemos nada que decirte, pues sólo deseamos escuchar Tu Palabra y hacerla nuestra. Guía nuestras prácticas tal como un padre guía a su hijo pequeño por un camino que éste desconoce, pero que aun así, el hijo lo sigue, seguro de que está a salvo porque su padre le muestra el camino."

"De este modo es como llevamos nuestras prácticas hasta Ti. Si tropezamos, Tú nos levantarás. Si se nos olvida el camino, sabemos que Tú siempre lo recordarás. Y si nos extraviamos, Tú no te olvidarás de llamarnos. Aligera nuestros pasos ahora de modo que podamos caminar con mayor certeza y mayor rapidez hasta Ti. Y aceptamos la Palabra que Tú nos ofreces para unificar nuestras prácticas, a medida que repasamos los pensamientos que Tú nos has dado."

Amén. 


PENSAMIENTO CENTRAL:


Recordemos que tenemos un pensamiento central a lo largo de los 10 días de repaso:


"Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo." 


 Utilizaremos este pensamiento central antes y después de cada una de las 2 lecciones de repaso, como si las estuviéramos envolviendo en esta idea  central, con el propósito de "mantenerlo firme en la mente y claro en nuestra memoria a lo largo del día."


La intensidad que se nos pide para la práctica es cada vez mayor: "con ese pensamiento nos vamos a dormir para despertar con esas mismas palabras de nuevo en nuestros labios, y darle así la bienvenida al nuevo día."


Recordaremos y repetiremos este pensamiento a lo largo del día, lo utilizaremos como como si se tratara de un mantra, o como si estuviéramos practicando un rosario. 


PRÁCTICA:


Aquiétate durante 5 minutos como mínimo, o hasta 15 o 30 minutos, de acuerdo a tu disposición, en dos ocasiones  en el transcurso del día, preferiblemente una en la mañana y la  otra en la noche. Respira lenta y profundamente y mientras te vas relajando con la respiración, ve introduciendo  en tu consciencia las siguientes palabras:


"Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo." 


1. (169) "Por la gracia vivo. Por la gracia soy liberado."


"Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo." 


 2. (170) "En Dios no hay crueldad ni en mí tampoco."


"Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo." 


Y en la medida que te relajas, y en profundo silencio interior, con mucha fe y convicción reconoces el Amor de Dios y aceptando que tú también lo eres por ser Su Hijo bien amado, así que pídele al Espíritu Santo que te ayude a experimentar el amor que eres, y te lleve a contemplar a Dios, y en medio de la quietud y el silencio déjate ir, poderosos compañeros te guiarán. 


PRÁCTICAS CORTAS Y FRECUENTES:


Nos sentaremos un par de minutos cada hora, en silencio a reiterar nuestro único propósito de recordar y aceptar a Dios,  reconociendo que Su Amor es también el nuestro, solo debemos aceptarlo, y permitirnos experimentarlo, y en silencio y quietud nos decimos:


"Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo." 


1. (169) "Por la gracia vivo. Por la gracia soy liberado."


"Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo." 


 2. (170) "En Dios no hay crueldad ni en mí tampoco."


"Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo." 


El Amor es la Fuente de la Creación. Es la “sustancia”  con la que fuimos hechos y nos une, es el poder y la inteligencia que dirige  e integra todo, es una manifestación  constante de paz y dicha, por lo que, el Amor nunca dejará de ser Amor. De ahí que en Dios no puede haber  crueldad, pues sería la negación de Si mismo, de un Amor todo abarcante y sin opuestos. De la misma manera, yo que soy Su Hijo, y fui creado a Su semejanza, tampoco podría ser cruel, pues el Amor y la crueldad no pueden coexistir. El amor siempre ha sido coherente, o dejaría de serlo, por la sencilla razón que "Dios es sólo Amor y, por ende, eso es lo que soy yo."  y por Su gracia vivo eternamente, por Su gracia Soy, y por Su gracia he sido liberado de toda creencia que niegue el Amor, y por Su gracia seguiré siendo el Amor que me habita mas allá de todo tiempo o lugar, pues el Amor es, y guardamos un gozoso silencio al contemplar la extraordinaria belleza de lo que somos: una fuente inagotable de luz, paz y dicha. 

  


Texto









CELEBRANDO EL MILAGRO 


CELEBRA LA CORRECCIÓN QUE OCURRE AHORA 


BENDICIONES!





Share:

Facebook comments: